Una de las discusiones más habituales en relación a la obra pictórica de Leonardo es si “la Gioconda es fondo o figura”. Es decir, ¿qué es más importante, la figura o el fondo? O en todo caso, ¿hemos de dar a ambos aspectos una importancia equivalente?

Siempre se ha dicho que en el arte de Leonardo hay poco sitio para los espacios humanizados: un puente en la Gioconda, unas ruinas en la Adoración de los Magos, una ciudad lejana en la Anunciación... Pero la discusión sigue abierta: ¿son los fondos de la obra de Leonardo un mero escenario sin vida? ¿O pretenden ser algo más? En definitiva, ¿pretenden expresar un mensaje?

Desde mi punto de vista sí. Los fondos de Leonardo son algo más que un decorado imaginario. El genio florentino lo expresó con toda claridad en su Tratado de la Pintura: “Mirar un paisaje pintado puede evocar el recuerdo de otros reales, en los cuales uno se complació alguna vez”.

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Los mensajes ocultos de Leonardo da Vinci