La huella masónica en Barcelona

 

         Es un hecho aceptado que el ideario masónico ha dejado una importante impronta en Occidente. En este artículo analizaré el papel que la masonería ha ejercido en la construcción de la ciudad moderna. Siguiendo la estela de importantes urbanistas, ingenieros y filántropos, como Ildefons Cerdà, Gustave Eiffel, Auguste Bartholdi o Rosend Arús, comprenderemos la significación que los más relevantes monumentos del siglo XIX tienen en un período considerado “la Edad de Oro” del maquinismo, de la razón, y del progreso económico y social.

 

A propósito del fin del mundo

 

            Escribo el día 20 de diciembre del 2012. A pocas horas del fin del mundo, de acuerdo a una lectura errónea del calendario maya, miles de personas, y cientos de medios de prensa, se arremolinan en el minúsculo pueblo de Bugarach. Pocos saben que el meridiano de París, que no es el meridiano 0 geográfico (el cual pasa por Greenwich), pero sí el primero medido de forma científica, atraviesa de forma sorprendentemente precisa el pico Bugarach, a escasos kilómetros de la localidad homónima. Sea casualidad o no, el arco de meridiano de París, empleado por los científicos de finales del siglo XVIII para calcular la unidad de medida llamada “metro”, no podía faltar a la cita del imaginario armaggedón maya.

            Si seguimos la línea marcada por este arco de meridiano, veremos que llega a su fin en la playa de Ocata, cerca de la ciudad de Barcelona. A escasos kilómetros de allí se sitúa el antiguo faro del puerto de Barcelona, desde el cual se realizó la última triangulación (un procedimiento geométrico para calcular longitudes geográficas) con la cual se estableció la medida del arco de meridiano que enlaza la ciudad de Dunkerque y Barcelona, pasando por París.

            Y se da la circunstancia de que este antiguo faro (hoy llamado Torre del Rellotge), tan importante en la determinación del meridiano de París y de la longitud del “metro”, tiene un papel muy relevante en la “geometría sagrada” del trazado urbano de Barcelona. Si prolongamos en líneas imaginarias las avenidas de esta ciudad conocidas como el Paralelo y la Meridiana, éstas confluyen en dicho faro. La Gran Vía de Barcelona intersecta con ambas avenidas en la Plaza España y en la Plaza de les Glòries Catalanes, conformando un triángulo equilátero. El nombre del Paralelo y de la Meridiana, el primero en una posición E-O perfecta, y la segunda en una posición N-S perfecta, alude al hecho de que ambas vías urbanas están alineadas de forma precisa con el paralelo y el meridiano que las atraviesan. Ello no es casualidad, por supuesto.

            Continuemos con el análisis de la “geometría sagrada” de la ciudad de Barcelona. Si prolongamos el Paralelo y la Meridiana tendremos una gran letra A, que podemos dividir en dos si tenemos en cuenta que la prolongación del Paseo de Gracia, esa gran avenida que divide el lado izquierdo y derecho del Ensanche de Barcelona, desemboca de forma asombrosamente precisa, de nuevo, en el faro antiguo de Barcelona. Es decir, este último, no sólo estructura todo el trazado urbano de la Barcelona moderna (diseñado por el urbanista Ildefons Cerdà), sino que además define un importante símbolo, muy apreciado por los iniciados masones: la doble A. A ello me refiero cuando hablo de la “geometría sagrada” de Barcelona.

            (Nótese que A partida por la mitad que se observa en el plan urbanístico de Cerdà tiene una forma idéntica al “nivel”, símbolo masónico que alude al equilibrio. Éste es el propósito último de Cerdà al diseñar el Ensanche de Barcelona: promover la igualdad social entre sus habitantes. Sea como sea, el nivel es representado gráficamente como una letra A.)

            Estoy convencido de que esta curiosa circunstancia (un faro, poderoso símbolo masónico, que delimita dos letras A y estructura la totalidad del Ensanche de Barcelona) es mucho más que un homenaje, por parte de Cerdà, a los ingenieros franceses y españoles que, dos generaciones antes, dieron pie al sistema métrico decimal, la principal empresa científica a caballo entre los siglos XVIII y XIX. No en vano, Ildefons Cerdà, presunto masón (en cualquier caso lo era su hija Clotilde Cerdà), emplearía –quizás- como modelo de su trama urbana el primer ejemplo moderno de la “geometría sagrada” masónica: el plano de la ciudad de Washington.

 

Índice:

 

A propósito del fin del mundo

El sello masónico en el plano urbano de Washington

Ildefons Cerdà, un discípulo aventajado

La Barcelona masónica

La Doble A como testimonio de la impronta masónica en Barcelona

El año 1888, fecha clave de la Barcelona moderna

La torre Eiffel: el faro que ilumina el mundo

La sombra del meridiano

CUADRO DE TEXTO NÚMERO 1: “EL CÓDIGO DA VINCI Y EL MERIDIANO DE PARÍS”

CUADRO DE TEXTO NÚMERO 2: “EL MERIDIANO”

CUADRO DE TEXTO NÚMERO 3: “UNAS INNOVACIONES MAL ACOGIDAS”

 

 

 

Para leer el artículo entero:

Temas de Historia Oculta (2). Las doctrinas prohibidas